Cuando me haya ido
No habrá lugar para mis recuerdos imborrables
Los veranos se volverán más fríos
Se esparcirán mis restos por todos lados
Y habrá una ley que prohibirá mi nombre
Cuando me haya ido
Aterrizaran aviones por todas partes
No va a importar llegar tarde a ningún lado
Se desplomarán en un segundo todos los miedos
Y habrá una estrella menos en la infinitud del cielo
Cuando me haya ido
Desaparecerán las cabezas rubias de mi pasado
Todo será conciencia, y se sabrá finalmente todo
Extrañaré mucho las mañanas con voz de niña
Y me ahogaré en mi orilla para remediarlo
Cuando me haya ido
Se derrumbarán todos los monumentos
Resultaran vanas todas las explicaciones
No importarán los recuerdos, ni las palabras, ni el sufrimiento
Cuando yo ya me haya ido
Habrá un jardín con espacio para todos
Excepto para mí, que estaré muerto.
Estimado José Maria, vivo en City Bell, calle Tacuarí, me llamo Agustín, y soy un asiduo lector de su blog, el cual recomiendo cada vez que puedo. Solo quería saludarlo, y transmitirle algo que escribí recientemente por si le resulta de interés para publicar en su blog. Gracias por hacer un blog de City Bell!!! Saludos cordiales.
GRACIAS A VOS, AGUSTÍN, ABRAZO GRANDE, Jmp
Foto: estación de City Bell, Jmp